Ningún animal tiene un pelaje más distintivo que la cebra. Las rayas de cada animal son tan únicas como las huellas dactilares, no hay dos exactamente iguales, aunque cada una de las tres especies tiene su propio patrón general. ¿Por qué las cebras tienen rayas? Los científicos no están seguros, pero muchas teorías se centran en su utilidad como una forma de camuflaje. Los patrones pueden dificultar que los depredadores identifiquen un solo animal de una manada en funcionamiento y distorsionen la distancia al amanecer y al atardecer. O pueden disuadir a los insectos que reconocen solo grandes áreas de pelaje de un solo color o que actúan como un tipo de protector solar natural. Debido a su singularidad, las rayas también pueden ayudar a las cebras a reconocerse entre sí.
Las cebras son animales sociales que pasan tiempo en rebaños. Ellos pastan juntos, principalmente en pasto, e incluso se acicalan entre sí. Los grupos familiares son miembros estables que mantienen fuertes lazos durante muchos años. La preparación mutua, donde las cebras se unen y mordisquean el pelo del cuello y la espalda del otro, ayuda a desarrollar y preservar estos vínculos. Los miembros de la familia se cuidan mutuamente si uno se separa del resto, los demás lo buscan. El grupo ajusta su ritmo de viaje para acomodar a los viejos y débiles.
Las mujeres dentro de una familia observan un estricto sistema jerárquico. Una yegua dominante siempre lidera el grupo, mientras que otros la siguen en fila india, cada uno con sus potros directamente detrás de ellos. La cebra de menor rango es la última en la fila. Aunque el semental es el miembro dominante de la familia, él opera fuera del sistema y no tiene un lugar especial en la línea.
Las cebras de llanuras son las especies más comunes. Viven en pequeños grupos familiares compuestos por un macho (semental), varias hembras y sus crías. Estas unidades pueden combinarse con otras para formar rebaños imponentes de miles de cabezas fuertes, pero los miembros de la familia se mantendrán cerca de la manada.
Las cebras son animales herbívoros; son ávidos pastores. Las cebras de están en constante búsqueda de pastos verdes. En la estación seca, pueden vivir en la hierba gruesa y seca solo si se encuentran a poca distancia (por lo general, a no más de 30 km de distancia) de los pozos de agua.
Las cebras de Burchell habitan en sabanas, desde pastizales sin árboles hasta bosques abiertos; a veces ocurren en decenas de miles en rebaños migratorios en las llanuras de Serengeti. Las cebras de Grevy ahora están restringidas principalmente a partes del norte de Kenia. Aunque están adaptados a condiciones semiáridas y requieren menos agua que otras especies de cebras, estas cebras compiten con el ganado doméstico por agua y han sufrido una fuerte caza furtiva por su carne y sus pieles.
Cuando nace un potro, la madre mantiene a todas las demás cebras (incluso a los miembros de su familia) lejos de ella durante 2 o 3 días, hasta que aprende a reconocerla por la vista, la voz y el olfato.
Mientras que todos los potros tienen una asociación cercana con sus madres, los potros machos también están cerca de sus padres. Dejan su grupo por su cuenta entre las edades de 1 y 4 años para unirse a un grupo de solteros exclusivamente masculinos hasta que sean lo suficientemente fuertes como para encabezar una familia.
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